Imponente y majestuosa, dos palabras con las que se puede describir a La Huasteca.

Cerca de la ciudad de Monterrey se encuentra uno de los sitios más increíbles y representativos de la entidad.

Dirigiéndonos hacia el poniente, con rumbo a Santa Catarina nos encontramos con el Parque Ecológico La Huasteca, que con sus imponentes vistas deja maravillado a todo el que pisa este lugar.

En 2006, la UNESCO declaró a esta zona reserva de la biósfera, pues en ella habitan una gran cantidad de especies originarias del semidesierto y del bosque debido a que se encuentra en los límites de la Sierra Madre Oriental y el Gran Desierto Chihuahuense.

Una misteriosa residencia entre los riscos

Este lugar por sí solo ya es impresionante, pero una cosa que llama mucho la atención de aquellos que lo visitan: es una casona abandonada que fue construida sobre una de las montañas que conforman este paraje.

Se preguntarán quién fue el propietario de dicha construcción, bueno, pues se trata del eminente Dr. Eduardo Aguirre Pequeño, quien era propietario de una parte de los terrenos que conforman La Huasteca, hasta que el Gobierno de Nuevo León, bajo el mandato de Jorge Treviño, expropia dichas propiedades, quedando esta casa en el abandono y siendo actualmente visitada por muchos curiosos.

Un lugar de conciertos increíbles

Hasta hace algunos años se organizaban algunos eventos masivos en este lugar, como lo fueron las primeras ediciones del Hellow Festival , el cual ahora se realiza en el Parque Fundidora y ha traído a artistas de la talla de Maroon 5, Tyler the Creator, Weezer y Brandon Flowers de The Killers, pero sin duda uno de los conciertos más emblemáticos que se han realizado en la Huasteca fue el que dio Manu Chao en septiembre de 2008.

El ex-líder de Mano Negra se presentó ante miles de fanáticos en un show como ningún otro, pues el talento de este cantante franco-español es innegable. Con impresionantes vistas de los picos que rodeaban al escenario y temas como “Welcome to Tijuana”, “La Despedida” y “Volver” de fondo, podría ser considerado uno de los mejores conciertos de la década pasada en Nuevo León.

El sitio por excelencia para deportes extremos

Con sus enormes paredes rocosas La Huasteca es un paraíso para los amantes de la escalada y el rappel.

Turistas de todo el mundo llegan para conquistar los diferentes picos que la conforman, como lo es el Pico Independencia o el Pico Lichos.

El Nido de los Aguiluchos y Cueva de la Virgen son otras de las maravillas que más son frecuentadas.

El ciclismo es otra de las actividades que suelen realizarse. Nada se compara con aventurarse por las diferentes veredas mientras disfrutas de un paisaje sin igual.

La Presa Rompepicos

En septiembre de 1985 el estado de Nuevo León fue azotado por el Huracán Gilberto, catalogado como uno de los peores en la historia de la entidad. Muchas de las zonas bajas de la metrópoli quedaron bajo el agua debido a las intensas lluvias que acrecentaron el cauce del Río Santa Catarina.

Ante esto la administración del ex-gobernador Sócrates Rizzo García dio luz verde para la construcción de la Presa Rompepicos, la cual fue inaugurada en 2007 por el entonces gobernador José Natividad González Parás.

La importancia de esta obra radica en que gracias a ella se pudo evitar una catástrofe mayor cuando el Huracán Alex (que se dice fue aún más poderoso que el Gilberto) afectó a la ciudad; además, también sirve como una importante reserva de agua en tiempos de sequía.

Por estas y muchas razones más, La Huasteca es considerada un emblema neoleonés del cual hay que sentirse orgullosos, pues pocos sitios en el país se le comparan. ¿Y tú, ya la visitaste?