Gastronomía

Siete delicias de Nuevo León que tienes que probar

Estos son algunos de los platillos y postres más representativos del estado de Nuevo León. Nuevo León no es solo un estado de industria y servicios médicos, pues la gente que viene de otros estados o países puede disfrutar de una gran cantidad cosas, entre ellas la gastronomía, uno de los aspectos que suele ser … Leer más

Por: Luis Montemayor

delicias-neoleonesas-platillos

Estos son algunos de los platillos y postres más representativos del estado de Nuevo León.

Nuevo León no es solo un estado de industria y servicios médicos, pues la gente que viene de otros estados o países puede disfrutar de una gran cantidad cosas, entre ellas la gastronomía, uno de los aspectos que suele ser de gran interés para toda aquella persona que anda de visita en un nuevo lugar.

Estas son las siete delicias de Nuevo León que tienes que probar

Por ello vamos a repasar algunas delicias neoleonesas para que los foráneos puedan conocer un poco de la cocina de nuestro estado, aunque también puede que algunos de esta misma tierra no hayan probado todos estos platillos.

1.- Arrachera

arrachera

La arrachera es un corte que proviene del diafragma de la res, un músculo que separa la cavidad toráxica de la abdominal. Se trata de uno de los manjares que más disfrutan los habitantes de Nuevo León.

Es un platillo que suele tener un precio un tanto elevado en los restaurantes, aunque curiosamente este corte era considerado “basura” en los Estados Unidos.

Fue gracias al señor José Inés Cantú Venegas que este platillo se hizo famoso en Monterrey y el resto del estado, pues en una visita a Laredo Texas le ofrecieron este corte que le pareció una delicia.

Tras su regreso, comenzó a comercializarlo en estos lares y lo bautizó como arrachera, porque era la palabra que usaba su padre para referirse al cincho con el que ajusta la montura de los caballos.

Como dato adicional, este hombre fue dueño del restaurante “El Regio” y de la empresa Ponderosa.

2.- Empalmes

Los empalmes son un complemento que no puede faltar en las carnes asadas.

Se trata de dos tortillas empalmadas (de allí su nombre) untadas con manteca de puerco, frijoles molidos, queso, salsa de tomate y orégano (la receta tradicional), aunque también se hacen de queso con chorizo y carne deshebrada.

Este platillo es muy consumido en Nuevo León, sobre todo en el Valle de las Salinas y el Valle de Carrizal, zonas entre las que se ubica el municipio de General Zuazua, de donde son originarios (eso dicen).

3.- Tortillas de harina

tortillas-de-harina

Si estás en Monterrey y vas a un puesto de tacos mañaneros no faltará la pregunta por excelencia de parte del taquero: “¿en harina o maíz?”, en referencia a qué tipo de tortilla prefieres para tus tacos.

La mayoría de los neoleoneses preferimos las de harina, pero nada como las caseras (aunque no todas las personas tengan “gracia” para hacerlas).

Son un manjar cuando se comen con frijoles (molidos o en bola) con chorizo y acompañadas de unas rebanaditas de aguacate o para degustar de un buen queso flameado.

Las quesadillas en este tipo de tortilla también quedan muy sabrosas.

Hay muchos (entre ellos me incluyo) que disfrutan de comerlas untadas de aguacate y un poco de sal, o con mantequilla o margarina. Un verdadero placer.

Te puede interesar: Felinos de Nuevo León

4.- Glorias

glorias-de-linares

Sin duda el dulce más famoso de Nuevo León. Su origen se le adjudica a la señora Natalia Medina Núñez, habitante del municipio de Linares, en la región citrícola, quien preparaba otro dulce llamado marqueta. Buscando vender uno que fuese más pequeño y económico fue que creó este manjar.

Se hace a base de leche “quemada” de cabra y su nombre proviene de su rico sabor, pues la gente que lo probaba decía que sabía a “gloria”.

Aunque hoy en día las Glorias se pueden encontrar en tiendas y supermercados de todo el estado, “las meras buenas” y originales son las de Linares, una razón por la que mucha gente va de visita a este pueblo mágico.

5.- Atropellado

Este platillo se prepara dorando carne seca en manteca de puerco, para después ser guisada con ajo, cebolla, orégano y tomate.

La forma más común de comerlo es acompañado de unos frijoles molidos y tortillas, preferentemente de harina, pues como mencioné anteriormente, son las consentidas de los neoleoneses.

6.- Machacado con huevo

Este platillo es también uno de los más consumidos por la gente de Nuevo León, sobre todo durante el almuerzo, siendo uno de los guisos que rara vez faltan en los puestos de tacos mañaneros.

Su origen se remonta a 1928, en el municipio de Ciénega de Flores. Su creadora fue Fidencia Quiroga, mejor conocida como la Tía Lencha, quien lo preparaba para los trabajadores que estaban construyen el tramo de la carretera a Laredo que atraviesa esta pequeña ciudad.

Es de una mezcla de carne seca de res (aunque hay quienes le ponen de venado) con huevo revuelto y guisada con chile, tomate y cebolla. Se suele acompañar de frijoles molidos, rebanadas de aguacate y, por supuesto, tortillas de harina.

Te recomendamos: Brujería y curanderismo en La Petaca

7.- Cabrito al pastor

Y para finalizar con esta lista tenemos el platillo emblema de Nuevo León: el cabrito al pastor.

Cuando uno visita el estado, principalmente la capital, Monterrey, notará que hay una gran cantidad de restaurantes que ofrecen este alimento, el cual suele tener un precio un tanto elevado.

El cabrito lleva siglos consumiéndose en este punto de México y su origen se les adjudica a los judíos sefarditas que llegaron junto con los colonizadores españoles a esta zona.

Para prepararlo se necesita una cría de chivo de entre 28 y 35 días de nacido, ya que si es mayor el sabor no será el mismo, y se dice que después de esa edad ya no es cabrito.

Para su preparación, el cabrito es ensartado en una varilla para luego dejarlo al calor de las brasas. Su preparación es algo lenta, pues hay que estarlo volteando en repetidas ocasiones para que se cocine bien. Este proceso tarda alrededor de dos horas.

La cabeza del cabrito se suele preparar aparte, envuelta en aluminio y dejada en las brasas, además de que el corazón y el hígado se envuelven en las vísceras para hacer el famoso machito.

Mucho que probar en estas tierras

Hay muchas cosas más dentro de la cocina tradicional de Nuevo León que no se incluyeron en esta lista debido a que quedaría muy larga, como por ejemplo los frijoles con veneno, la fritada y la zaraza, pero hablaremos de ellas en otra ocasión.

Así que, si tienes de visita a algún familiar o amigo de otra parte del mundo, no dudes en mostrarle esta lista y hacer que pruebe estas delicias.

Está nota también va dedicada para aquellos despistados de Nuevo León que aún no prueban alguno de estos alimentos.

Te recomendamos:

Siete delicias de Nuevo León que tienes que probar

Estos son algunos de los platillos y postres más representativos del estado de Nuevo León.

Nuevo León no es solo un estado de industria y servicios médicos, pues la gente que viene de otros estados o países puede disfrutar de una gran cantidad cosas, entre ellas la gastronomía, uno de los aspectos que suele ser de gran interés para toda aquella persona que anda de visita en un nuevo lugar.

Estas son las siete delicias de Nuevo León que tienes que probar

Por ello vamos a repasar algunas delicias neoleonesas para que los foráneos puedan conocer un poco de la cocina de nuestro estado, aunque también puede que algunos de esta misma tierra no hayan probado todos estos platillos.

1.- Arrachera

arrachera

La arrachera es un corte que proviene del diafragma de la res, un músculo que separa la cavidad toráxica de la abdominal. Se trata de uno de los manjares que más disfrutan los habitantes de Nuevo León.

Es un platillo que suele tener un precio un tanto elevado en los restaurantes, aunque curiosamente este corte era considerado “basura” en los Estados Unidos.

Fue gracias al señor José Inés Cantú Venegas que este platillo se hizo famoso en Monterrey y el resto del estado, pues en una visita a Laredo Texas le ofrecieron este corte que le pareció una delicia.

Tras su regreso, comenzó a comercializarlo en estos lares y lo bautizó como arrachera, porque era la palabra que usaba su padre para referirse al cincho con el que ajusta la montura de los caballos.

Como dato adicional, este hombre fue dueño del restaurante “El Regio” y de la empresa Ponderosa.

2.- Empalmes

Los empalmes son un complemento que no puede faltar en las carnes asadas.

Se trata de dos tortillas empalmadas (de allí su nombre) untadas con manteca de puerco, frijoles molidos, queso, salsa de tomate y orégano (la receta tradicional), aunque también se hacen de queso con chorizo y carne deshebrada.

Este platillo es muy consumido en Nuevo León, sobre todo en el Valle de las Salinas y el Valle de Carrizal, zonas entre las que se ubica el municipio de General Zuazua, de donde son originarios (eso dicen).

3.- Tortillas de harina

tortillas-de-harina

Si estás en Monterrey y vas a un puesto de tacos mañaneros no faltará la pregunta por excelencia de parte del taquero: “¿en harina o maíz?”, en referencia a qué tipo de tortilla prefieres para tus tacos.

La mayoría de los neoleoneses preferimos las de harina, pero nada como las caseras (aunque no todas las personas tengan “gracia” para hacerlas).

Son un manjar cuando se comen con frijoles (molidos o en bola) con chorizo y acompañadas de unas rebanaditas de aguacate o para degustar de un buen queso flameado.

Las quesadillas en este tipo de tortilla también quedan muy sabrosas.

Hay muchos (entre ellos me incluyo) que disfrutan de comerlas untadas de aguacate y un poco de sal, o con mantequilla o margarina. Un verdadero placer.

Te puede interesar: Felinos de Nuevo León

4.- Glorias

glorias-de-linares

Sin duda el dulce más famoso de Nuevo León. Su origen se le adjudica a la señora Natalia Medina Núñez, habitante del municipio de Linares, en la región citrícola, quien preparaba otro dulce llamado marqueta. Buscando vender uno que fuese más pequeño y económico fue que creó este manjar.

Se hace a base de leche “quemada” de cabra y su nombre proviene de su rico sabor, pues la gente que lo probaba decía que sabía a “gloria”.

Aunque hoy en día las Glorias se pueden encontrar en tiendas y supermercados de todo el estado, “las meras buenas” y originales son las de Linares, una razón por la que mucha gente va de visita a este pueblo mágico.

5.- Atropellado

Este platillo se prepara dorando carne seca en manteca de puerco, para después ser guisada con ajo, cebolla, orégano y tomate.

La forma más común de comerlo es acompañado de unos frijoles molidos y tortillas, preferentemente de harina, pues como mencioné anteriormente, son las consentidas de los neoleoneses.

6.- Machacado con huevo

Este platillo es también uno de los más consumidos por la gente de Nuevo León, sobre todo durante el almuerzo, siendo uno de los guisos que rara vez faltan en los puestos de tacos mañaneros.

Su origen se remonta a 1928, en el municipio de Ciénega de Flores. Su creadora fue Fidencia Quiroga, mejor conocida como la Tía Lencha, quien lo preparaba para los trabajadores que estaban construyen el tramo de la carretera a Laredo que atraviesa esta pequeña ciudad.

Es de una mezcla de carne seca de res (aunque hay quienes le ponen de venado) con huevo revuelto y guisada con chile, tomate y cebolla. Se suele acompañar de frijoles molidos, rebanadas de aguacate y, por supuesto, tortillas de harina.

Te recomendamos: Brujería y curanderismo en La Petaca

7.- Cabrito al pastor

Y para finalizar con esta lista tenemos el platillo emblema de Nuevo León: el cabrito al pastor.

Cuando uno visita el estado, principalmente la capital, Monterrey, notará que hay una gran cantidad de restaurantes que ofrecen este alimento, el cual suele tener un precio un tanto elevado.

El cabrito lleva siglos consumiéndose en este punto de México y su origen se les adjudica a los judíos sefarditas que llegaron junto con los colonizadores españoles a esta zona.

Para prepararlo se necesita una cría de chivo de entre 28 y 35 días de nacido, ya que si es mayor el sabor no será el mismo, y se dice que después de esa edad ya no es cabrito.

Para su preparación, el cabrito es ensartado en una varilla para luego dejarlo al calor de las brasas. Su preparación es algo lenta, pues hay que estarlo volteando en repetidas ocasiones para que se cocine bien. Este proceso tarda alrededor de dos horas.

La cabeza del cabrito se suele preparar aparte, envuelta en aluminio y dejada en las brasas, además de que el corazón y el hígado se envuelven en las vísceras para hacer el famoso machito.

Mucho que probar en estas tierras

Hay muchas cosas más dentro de la cocina tradicional de Nuevo León que no se incluyeron en esta lista debido a que quedaría muy larga, como por ejemplo los frijoles con veneno, la fritada y la zaraza, pero hablaremos de ellas en otra ocasión.

Así que, si tienes de visita a algún familiar o amigo de otra parte del mundo, no dudes en mostrarle esta lista y hacer que pruebe estas delicias.

Está nota también va dedicada para aquellos despistados de Nuevo León que aún no prueban alguno de estos alimentos.

Deja un comentario